i-Onion: innovación para diagnosticar la enfermedad del ojo seco

10 de julio de 2023

La falta de herramientas cuantitativas para diagnosticar el síndrome del ojo seco es un importante problema sanitario y los promotores de i-Onion, del Instituto de Neurociencias CSIC-UMH, percibieron la oportunidad de aplicar la innovación a una de sus líneas de investigación.

Lágrima, proyecto liderado por la Dra. Juana Gallar y el Dr. Carlos Belmonte, ha sido uno de los primeros proyectos de innovación de la oficina de innovación del IN (IN.Pulse) en 2018, año de su lanzamiento. Su desarrollo se impulsó durante 2019 y 2020, gracias a las ayudas públicas de la Agencia Valenciana de Innovación (AVI), y dio como resultado una patente y los primeros prototipos para pruebas en humanos.

Foto: Product i-Onion

El objetivo del proyecto Lágrima era obtener una herramienta útil para un diagnóstico más preciso de la enfermedad del síndrome del ojo seco, que afecta aproximadamente a 100 millones de personas en todo el mundo. Sus promotores se dieron cuenta de que la falta de herramientas cuantitativas era un problema importante en el diagnóstico de esta enfermedad, lo que les brindó la oportunidad de innovar con una de sus líneas de investigación.

Lágrima es un ejemplo de colaboración entre investigadores del Instituto de Neurociencias , el Instituto Tecnológico de Biomecánica de Valencia, y las empresas La Siesta Technologies y Grupo Idea, todo ello bajo la coordinación del equipo IN.Pulse

Actualmente, este proyecto se ha convertido en la spin-off mundial Tearful. Esa innovación es ahora un producto comercializable llamado i-Onion: el único dispositivo disponible en el mercado para medir el flujo lagrimal máximo del ojo, facilitando el diagnóstico del síndrome del ojo seco.

Tearful ha establecido alianzas con algunas de las principales instituciones oftalmológicas del mundo, como el Bascom Palmer Eye Institute de Miami, y su dispositivo i-Onion se está probando comercialmente en Estados Unidos, Europa y Asia, así como en mercados prioritarios.
Para desarrollar su plan de negocio, Tearful ya ha cerrado dos rondas de inversión que han multiplicado por 10 su valor y el coste de inversión de sus promotores. Estas inversiones procedían de inversores nacionales y los próximos pasos se centran en captar inversores en Estados Unidos. Esto permitirá entrar en el mercado estadounidense, a través de un inversor local, y obtener recursos económicos para escalar los procesos de industrialización y comercialización

Diego Belmonte, Director Ejecutivo de Tearful, indica que una de las claves del éxito es, sin duda, la creación de un equipo de trabajo fiable para desarrollar y actualizar el prototipo, y el negocio en torno a la innovación. De este modo, los investigadores no necesitan salir de sus funciones científicas. Esto facilita el proceso de innovación para los investigadores, ya que pueden permanecer en su área de especialización.